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Entrevista en el jardín de Jacobo Pereira: “Una vida entre plantas”

Jacobo Pereira es uno de los hijos de Consuelo Pereira, fundadora de Fronda. Creció entre invernaderos, sacos de sustrato y plantas que, como él, echaban raíces mientras se construía el sueño familiar. Hoy, cinco décadas después, celebramos 50 años de Fronda conversando con él en su propio jardín: un espacio íntimo, lleno de vida, donde se entrelazan la memoria, la naturaleza y la evolución constante.

Por Virginia Moreno
Creado el 25 de junio de 2025
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Además de estar profundamente vinculado a nuestra historia, Jacobo ha desarrollado su propio camino profesional como fundador de BabyGreen, una empresa innovadora especializada en el cultivo de brotes frescos que abastecen a algunos de los mejores chefs de España. En esta entrevista, nos habla de sus orígenes, de lo que significa vivir rodeado de plantas y del valor de un jardín como lugar de calma, aprendizaje y transformación.

Estamos en tu jardín, un lugar muy especial. ¿Qué significa para ti este espacio?

Para mí, este jardín es ante todo un lugar de encuentro con mis seres queridos. Es un espacio donde disfrutar del paso del tiempo, de las estaciones, del cambio constante… de las plantas y de la naturaleza.

¿Cuándo nació tu pasión por las plantas y la jardinería? ¿Hay algún momento clave que recuerdes?

La verdad es que no lo recuerdo con claridad, porque he estado rodeado de plantas desde antes incluso de tener uso de razón. Crecí a la vez que Fronda: acompañaba a mi madre mientras ella lo fundaba y daba forma a lo que luego sería el vivero. Muchos días de mi infancia transcurrieron allí, entre plantas, montones de abono y estiércol, jugando y respirando ese mundo vegetal desde muy pequeño.

¿Qué te aporta estar rodeado de naturaleza en tu día a día?

La naturaleza me transmite calma. Me da tranquilidad a la hora de afrontar el día y me ayuda a ver las cosas con otra perspectiva. Estar en un jardín, ver las plantas en su entorno, me invita a hablar y pensar en otro tono, con más serenidad.

¿Cómo ha evolucionado tu jardín a lo largo del tiempo?

Mi jardín ha evolucionado a su manera. Tengo la sensación de que a las plantas hay que dejarlas hablar, observarlas y entender si necesitan algo más, o incluso si deben cambiar de lugar. El jardín va marcando su propio camino, y uno aprende a escucharlo.

¿Hay alguna planta o rincón que sientas que te representa especialmente?

Diría que todos los rincones del jardín, y también de las plantas de interior en mi casa, me representan de algún modo. He participado activamente en su diseño y los he visto crecer. Pero hay una planta muy especial para mí: una beaucarnea que lleva conmigo más de 35 años. Vivía conmigo en casa de mis padres y, desde hace una década, me acompaña en mi hogar actual. Le tengo un cariño muy profundo.

¿Qué especies disfrutas más cuidar y por qué?

Disfruto especialmente de las plantas que requieren poco mantenimiento. Me gusta esa forma de convivir con ellas sin forzarlas, respetando su ritmo.

Tu madre, Consuelo Pereira, fundó una empresa que hoy cumple 50 años. ¿Crees que tu conexión con la naturaleza viene también de ahí, aunque tú la hayas hecho tuya?

Sin duda. Mi conexión con la naturaleza está profundamente ligada a mi infancia, que estuvo marcada por la creación de Fronda y por el jardín de nuestra casa familiar. Era un jardín grande, muy vivo, en el que convivimos muchos hermanos y muchas personas. Todo eso dejó una huella muy fuerte en mí.

¿Cómo ves el papel de los jardines y la naturaleza en un mundo tan acelerado como el actual?

Creo que su papel es absolutamente imprescindible. Cuando me independicé, uno de los planteamientos era ir a vivir a Madrid, a un piso. Pero me negué rotundamente. Para mí, tener contacto con la naturaleza es vital. Cada uno, dentro de sus posibilidades, debería tener un rincón verde, sea una terraza, un balcón o incluso una habitación interior. Las plantas aportan algo que ningún objeto decorativo puede dar: vida, calidez y conexión.

¿Qué te gustaría transmitir a quienes están descubriendo hoy el placer de tener un jardín o cuidar plantas?

Me gustaría decirles que disfruten del camino, del proceso que implica cuidar una planta. No se trata solo del resultado final, sino de todo lo que sucede entre medias: observar, aprender, equivocarse y volver a empezar.

Y para terminar, ¿cómo imaginas tu jardín dentro de 10 o 20 años?

Imagino un jardín con algunas plantas más desarrolladas, más adultas. También sé que, en ese tiempo, habré tenido que prescindir de otras para dejar espacio a las que han crecido. Eso es lo que mantiene vivo a un jardín: la evolución constante y las decisiones que tomamos para acompañar ese cambio, con mayor o menor acierto.

Virginia Moreno
Virginia Moreno
Autor/a del artículo

Periodista de profesión y jardinera de corazón, Virginia ha dedicado los últimos años a enriquecer la comunidad de Fronda con su experiencia y conocimiento profundo en el cuidado de las plantas. Su trabajo refleja no solo su amor por el verde sino también un compromiso con la precisión y la calidad, siendo asesorada por los más destacados expertos de Fronda. Cada artículo de Virginia es un testimonio de su viaje continuo a través del aprendizaje y la colaboración, asegurando que cada lector pueda cultivar no solo plantas, sino también amor por la naturaleza.