Hortensia de Interior blanca

• Resguardo inicial: coloca tu hortensia en un área bien iluminada, fresca y ventilada dentro de tu hogar, alejadas de fuentes de calor y corrientes de aire frío.
• Elección de recipientes: utiliza macetas pequeñas o contenedores  medianos o grandes, con buen drenaje.
• Cuidado interior: durante los primeros meses, rocía el follaje ocasionalmente para evitar que las puntas de las hojas se sequen, manteniendo el sustrato húmedo, pero sin encharcar las raíces.
• Riego: a la hora de regar lo primero que has de tener en cuenta es lo siguiente:

                      -Control de la humedad del suelo: la hortensia prefiere un suelo húmedo pero bien drenado. Antes de regar, verifica la humedad del suelo introduciendo tu dedo un poco en la tierra. Si sientes que el suelo está seco en esta profundidad, es hora de regar.

                      -Sustrato húmedo: en cuanto al riego, es importante destacar que la hortensias siempre necesitan de un sustrato húmedo. Pero ten en cuenta, no obstante, que si le falta agua en algún momento, con sólo meterle agua, la planta se recuperará pronto.

                      -Frecuencia de riego. Lo ideal para la hortensia de interior es el riego regular, pero moderado. Durante el verano, es probable que necesites regar con más frecuencia debido a las altas temperaturas y la evaporación del agua. Sin embargo, es importante no excederse. Riega por abajo cuando la capa superior del suelo esté seca al tacto, pero evita que la planta se seque por completo entre riegos para evitar que no se quede encharcada.

• Fertilización adecuada: utiliza un fertilizante especial para hortensias para mantener su vitalidad y trasplantarlas a un recipiente más grande si es necesario, utilizando un sustrato rico y permeable.
• Control del pH: si es necesario, agrega turba rubia al sustrato para reducir el pH y asegurar un ambiente óptimo para el crecimiento saludable de estas plantas acidófilas.

No obstante, recuerda finalmente que las hortensias de interior pueden estar en terrazas o patios protegidos de las bajas temperaturas, en condiciones de temperatura media, sombra, luz y humedad similares a las hortensias de exterior en los meses que van desde marzo a noviembre. Es una de las ventajas, de hecho, de que vayan plantadas en macetas, que se convierten en plantas portátiles.