Más información
Tulbaghia violacea, es una planta vivaz rizomatosa robusta que alcanza hasta 50 cm de altura. Se caracteriza por sus hojas basales de color verde grisáceo y flores púrpura pálido fragantes que aparecen en grandes umbelas terminales desde finales del verano hasta principios de otoño.
Esta planta es valorada por su rápido crecimiento y sus hojas lineales, que emanan un agradable aroma a cebolla cuando se aplastan. Las flores estrelladas con una pequeña corona en forma de copa son un espectáculo visual, atrayendo a polinizadores y embelleciendo cualquier jardín con su presencia prolongada.
Originaria de Sudáfrica, Tulbaghia violacea se adapta bien en suelos fértiles, bien drenados y prefiere condiciones de pleno sol. Es ideal para jardines de clima mediterráneo, bordes de flores y como planta en maceta debido a su tolerancia a la sequía una vez establecida.
- Familia: Amaryllidaceae
- Altura que alcanza: 0,1–0,5 metros
- Extensión que alcanza: 0,1–0,5 metros
- Follaje: Deciduo
- Hábito: Forma agrupada
- Resistencia: Hasta -5°C (H3)
- Repele los mosquitos
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Tulbaghia violacea, es una planta vivaz rizomatosa robusta que alcanza hasta 50 cm de altura. Se caracteriza por sus hojas basales de color verde grisáceo y flores púrpura pálido fragantes que aparecen en grandes umbelas terminales desde finales del verano hasta principios de otoño.
Esta planta es valorada por su rápido crecimiento y sus hojas lineales, que emanan un agradable aroma a cebolla cuando se aplastan. Las flores estrelladas con una pequeña corona en forma de copa son un espectáculo visual, atrayendo a polinizadores y embelleciendo cualquier jardín con su presencia prolongada.
Originaria de Sudáfrica, Tulbaghia violacea se adapta bien en suelos fértiles, bien drenados y prefiere condiciones de pleno sol. Es ideal para jardines de clima mediterráneo, bordes de flores y como planta en maceta debido a su tolerancia a la sequía una vez establecida.
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- Hábito: Forma agrupada
- Resistencia: Hasta -5°C (H3)
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Tulbaghia violacea, es una planta vivaz rizomatosa robusta que alcanza hasta 50 cm de altura. Se caracteriza por sus hojas basales de color verde grisáceo y flores púrpura pálido fragantes que aparecen en grandes umbelas terminales desde finales del verano hasta principios de otoño.
Esta planta es valorada por su rápido crecimiento y sus hojas lineales, que emanan un agradable aroma a cebolla cuando se aplastan. Las flores estrelladas con una pequeña corona en forma de copa son un espectáculo visual, atrayendo a polinizadores y embelleciendo cualquier jardín con su presencia prolongada.
Originaria de Sudáfrica, Tulbaghia violacea se adapta bien en suelos fértiles, bien drenados y prefiere condiciones de pleno sol. Es ideal para jardines de clima mediterráneo, bordes de flores y como planta en maceta debido a su tolerancia a la sequía una vez establecida.
- Familia: Amaryllidaceae
- Altura que alcanza: 0,1–0,5 metros
- Extensión que alcanza: 0,1–0,5 metros
- Follaje: Deciduo
- Hábito: Forma agrupada
- Resistencia: Hasta -5°C (H3)
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Tulbaghia violacea, es una planta vivaz rizomatosa robusta que alcanza hasta 50 cm de altura. Se caracteriza por sus hojas basales de color verde grisáceo y flores púrpura pálido fragantes que aparecen en grandes umbelas terminales desde finales del verano hasta principios de otoño.
Esta planta es valorada por su rápido crecimiento y sus hojas lineales, que emanan un agradable aroma a cebolla cuando se aplastan. Las flores estrelladas con una pequeña corona en forma de copa son un espectáculo visual, atrayendo a polinizadores y embelleciendo cualquier jardín con su presencia prolongada.
Originaria de Sudáfrica, Tulbaghia violacea se adapta bien en suelos fértiles, bien drenados y prefiere condiciones de pleno sol. Es ideal para jardines de clima mediterráneo, bordes de flores y como planta en maceta debido a su tolerancia a la sequía una vez establecida.
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- Extensión que alcanza: 0,1–0,5 metros
- Follaje: Deciduo
- Hábito: Forma agrupada
- Resistencia: Hasta -5°C (H3)
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Tulbaghia violacea, es una planta vivaz rizomatosa robusta que alcanza hasta 50 cm de altura. Se caracteriza por sus hojas basales de color verde grisáceo y flores púrpura pálido fragantes que aparecen en grandes umbelas terminales desde finales del verano hasta principios de otoño.
Esta planta es valorada por su rápido crecimiento y sus hojas lineales, que emanan un agradable aroma a cebolla cuando se aplastan. Las flores estrelladas con una pequeña corona en forma de copa son un espectáculo visual, atrayendo a polinizadores y embelleciendo cualquier jardín con su presencia prolongada.
Originaria de Sudáfrica, Tulbaghia violacea se adapta bien en suelos fértiles, bien drenados y prefiere condiciones de pleno sol. Es ideal para jardines de clima mediterráneo, bordes de flores y como planta en maceta debido a su tolerancia a la sequía una vez establecida.
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- Altura que alcanza: 0,1–0,5 metros
- Extensión que alcanza: 0,1–0,5 metros
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- Hábito: Forma agrupada
- Resistencia: Hasta -5°C (H3)
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Esta planta es valorada por su rápido crecimiento y sus hojas lineales, que emanan un agradable aroma a cebolla cuando se aplastan. Las flores estrelladas con una pequeña corona en forma de copa son un espectáculo visual, atrayendo a polinizadores y embelleciendo cualquier jardín con su presencia prolongada.
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- Altura que alcanza: 0,1–0,5 metros
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Tulbaghia violacea, es una planta vivaz rizomatosa robusta que alcanza hasta 50 cm de altura. Se caracteriza por sus hojas basales de color verde grisáceo y flores púrpura pálido fragantes que aparecen en grandes umbelas terminales desde finales del verano hasta principios de otoño.
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Tulbaghia violacea, es una planta vivaz rizomatosa robusta que alcanza hasta 50 cm de altura. Se caracteriza por sus hojas basales de color verde grisáceo y flores púrpura pálido fragantes que aparecen en grandes umbelas terminales desde finales del verano hasta principios de otoño.
Esta planta es valorada por su rápido crecimiento y sus hojas lineales, que emanan un agradable aroma a cebolla cuando se aplastan. Las flores estrelladas con una pequeña corona en forma de copa son un espectáculo visual, atrayendo a polinizadores y embelleciendo cualquier jardín con su presencia prolongada.
Originaria de Sudáfrica, Tulbaghia violacea se adapta bien en suelos fértiles, bien drenados y prefiere condiciones de pleno sol. Es ideal para jardines de clima mediterráneo, bordes de flores y como planta en maceta debido a su tolerancia a la sequía una vez establecida.
- Familia: Amaryllidaceae
- Altura que alcanza: 0,1–0,5 metros
- Extensión que alcanza: 0,1–0,5 metros
- Follaje: Deciduo
- Hábito: Forma agrupada
- Resistencia: Hasta -5°C (H3)
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Cuidados
- Ubicación: Prefiere estar en pleno sol para florecer abundantemente. Aunque es tolerante, el sol directo favorece un mejor desarrollo floral.
- Suelo: Opta por un suelo bien drenado. Lo ideal es un suelo fértil, ligeramente arenoso o arcilloso que mantenga cierta humedad pero que drene bien el exceso de agua.
- Riego: Riega regularmente durante los meses de crecimiento activo en la primavera y el verano, reduciendo la frecuencia en invierno para prevenir el exceso de humedad en el suelo que podría dañar las raíces.
- Temperatura: Resiste hasta -5°C. En zonas con inviernos más fríos, es recomendable aplicar una capa de mulch para proteger los rizomas del frío extremo o trasladar las plantas en macetas a un interior no calefaccionado durante los meses más fríos.
- Propagación: Se puede propagar fácilmente por semillas al final del otoño o por división en la primavera. La división ayuda a revitalizar las plantas más antiguas y a mantener la salud del grupo.
- Poda: No es necesaria una poda regular. Sin embargo, eliminar las flores marchitas puede promover una segunda floración y mantener la planta visualmente atractiva.
- Plagas y enfermedades: Es generalmente resistente a plagas y enfermedades. Mantén un ojo en busca de áfidos durante los meses cálidos y trata cualquier infestación de manera oportuna para evitar daños mayores.